Escritura del condestable Iñigo hecha en presencia de sus parientes y deudos y ante el escribano Jerónimo de Santotis, disponiendo se reconozcan en todo tiempo como deudos y parientes de su Casa a su sobrino Bartolomé de Velasco y a sus descendientes, y como leales a sus reyes legítimos, según Bartolomé lo había acreditado perdiendo su casa y hacienda por defender a Enrique IV, y derramando su sangre, con grave riesgo de su vida, en la batalla de Villalar, y después contra los franceses, defendiendo al Emperador.